Darte cuenta que queda gente que te puede hacer pasar un rato agradable (o la vida) sin pedir nada a cambio, solo siendo ellos.
Que queda gente, que te inspira la confianza para contarle tu vida, o parte de ella en 2 horas, con quien puedes pasar un día completo hablando y los temas son interminables.
Gente que con 1 mojito, un gin tonic , 2 ‘’pequeñas’’ y una conversación, te das cuenta que es suficiente para saber el corazón que tiene, para que da, y para que no da.
Queda Gente que te inspira a tratar de sacarle una sonrisa, sin importar cuál sea la situación, gente que vale la pena tratar, acompañar, abrazar, seguir (aunque maneje muy rápido).
Yo pensaba que no, pero todavía hay gente que piensa que debe darle un ‘’pedazo’’ grande del pastel de la vida, al amor. Gente con quien vale la pena abrirse, gente con la que me propongo hacerle la vida más agradable, llevadera, positiva.
Juro que creía que no, pero queda gente que le gusta ‘’coger carretera’’ con espíritu aventurero, y pararse cuando le de la gana a ver el paisaje, a respirar, a vivir.
Gente, que cuando uno se la encuentra o se junta, uno no se quiere despedir.
La sorpresa más grande es que toda esa gente, sea una sola persona.
Juan O. Suarez
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